Esta semana ha sido completita. Pienso que ha sido productiva, pero tengo que estudiarla con más detenimiento.
Me he dado cuenta de que cometo siempre los mismos errores en las relaciones personales: Chica con unos ojos o color de pelo llamativos me llama la atención de sobremanera y me centro en ella como única chica en el mundo... hasta que me estrello con la realidad. En esta ocasión no me he dado de bruces, pero este fin de semana he repasado mi historial y es casi un bucle (salvo 2 excepciones: "S" y "8"). He pensado en ello con calma al ver una chica con cabello violeta grisáceo y piercings. Muy típico en mí.
El finde ha dado de sí más que toda la semana: fui a unas jornadas de juegos de mesa, viendo a conocidos y superando mis miedos, aunque hubo algo que marcó aún más la idea inicial: Estaba leyendo un prólogo que me estaba atando a una lectura que dejó mucho que desear y me ha devuelto una chica a la mente, "M". Leyendo el prólogo de "Araña" de Ana Gorría me han dado celos de no tener un prólogo así y me ha hecho pensar en lo que hubiera ganado "Esbozos de soledad" con un prólogo de esa chica de ojos marrones y con el tatuaje en honor a una canción de The Cure. Hubiera redondeado los noventa y pico poemas con unas frases suyas ya que lo que escribe es pura magia... pero no pudo ser. Si escribiera otro ensayo poético insistiría en que el prólogo fuera suyo. Llamadme loco si queréis.
Y seguiría tejiendo lo feliz que me ha hecho ver que alguien que sigue unicornios haya encontrado su príncipe, que las actividades cotidianas rozan lo monótono y que hay tesoros como amigos que no se podrían cambiar.
Me he dado cuenta de que cometo siempre los mismos errores en las relaciones personales: Chica con unos ojos o color de pelo llamativos me llama la atención de sobremanera y me centro en ella como única chica en el mundo... hasta que me estrello con la realidad. En esta ocasión no me he dado de bruces, pero este fin de semana he repasado mi historial y es casi un bucle (salvo 2 excepciones: "S" y "8"). He pensado en ello con calma al ver una chica con cabello violeta grisáceo y piercings. Muy típico en mí.
El finde ha dado de sí más que toda la semana: fui a unas jornadas de juegos de mesa, viendo a conocidos y superando mis miedos, aunque hubo algo que marcó aún más la idea inicial: Estaba leyendo un prólogo que me estaba atando a una lectura que dejó mucho que desear y me ha devuelto una chica a la mente, "M". Leyendo el prólogo de "Araña" de Ana Gorría me han dado celos de no tener un prólogo así y me ha hecho pensar en lo que hubiera ganado "Esbozos de soledad" con un prólogo de esa chica de ojos marrones y con el tatuaje en honor a una canción de The Cure. Hubiera redondeado los noventa y pico poemas con unas frases suyas ya que lo que escribe es pura magia... pero no pudo ser. Si escribiera otro ensayo poético insistiría en que el prólogo fuera suyo. Llamadme loco si queréis.
Y seguiría tejiendo lo feliz que me ha hecho ver que alguien que sigue unicornios haya encontrado su príncipe, que las actividades cotidianas rozan lo monótono y que hay tesoros como amigos que no se podrían cambiar.
"A veces te parece que no está,
que estuvo pero que un día se fue,
que se comió la tarta entera y qué
también dejó la cama sin hacer".
No hay comentarios:
Publicar un comentario