Cuando el diablo me hablo de ti...

... Supo que teclas tocar para que cayera embelesado y sin pensar en que algo pudiera salir mal. Fue un gran estratega porque destacó tu mirada, tu carácter y tu forma de reír, aunque nunca me habló de todos los contras.

Ejerció como comercial de un producto más que interesante, bastante atrayente pero sin ningún tipo de garantía. Intenté reclamar, que me devolvieran las noches en vela, las lágrimas derramadas, las posibles soluciones para volver a ser uno y no una mitad, las letras vertidas en papeles que se llevó el recuerdo de lo que pudo ser y no fue... creo que fue más largo el tiempo en el que pedí que todo volviera a como fue entre nosotros que lo que realmente duramos como pareja.

El diablo, como no tiene nada que hacer, se dedica a susurrarme tu nombre al oído. Sabe que de esa manera lo pasaré mal y se regocija viendo que es una situación en la que no puedo hacer nada, simplemente sentirme atado de pies y manos y con una mordaza que me prohíbe gritar para soltar todo lo que me corroe.

En fin, cosas que pasan, pasaron y espero que no vuelvan a pasarme.

Deseo que seas feliz, eso siempre lo haré.

"Cuando el diablo me habló de ti,
yo no sabía quién eras,
pesaba que tenía tofo el tiempo,

con el dinero en la cartera."

Arañicas

Esta semana ha sido completita. Pienso que ha sido productiva, pero tengo que estudiarla con más detenimiento.

Me he dado cuenta de que cometo siempre los mismos errores en las relaciones personales: Chica con unos ojos o color de pelo llamativos me llama la atención de sobremanera y me centro en ella como única chica en el mundo... hasta que me estrello con la realidad. En esta ocasión no me he dado de bruces, pero este fin de semana he repasado mi historial y es casi un bucle (salvo 2 excepciones: "S" y "8"). He pensado en ello con calma al ver una chica con cabello violeta grisáceo y piercings. Muy típico en mí.

El finde ha dado de sí más que toda la semana: fui a unas jornadas de juegos de mesa, viendo a conocidos y superando mis miedos, aunque hubo algo que marcó aún más la idea inicial: Estaba leyendo un prólogo que me estaba atando a una lectura que dejó mucho que desear y me ha devuelto una chica a la mente, "M". Leyendo el prólogo de "Araña" de Ana Gorría me han dado celos de no tener un prólogo así y me ha hecho pensar en lo que hubiera ganado "Esbozos de soledad" con un prólogo de esa chica de ojos marrones y con el tatuaje en honor a una canción de The Cure. Hubiera redondeado los noventa y pico poemas con unas frases suyas ya que lo que escribe es pura magia... pero no pudo ser. Si escribiera otro ensayo poético insistiría en que el prólogo fuera suyo. Llamadme loco si queréis.

Y seguiría tejiendo lo feliz que me ha hecho ver que alguien que sigue unicornios haya encontrado su príncipe, que las actividades cotidianas rozan lo monótono y que hay tesoros como amigos que no se podrían cambiar.

"A veces te parece que no está,

que estuvo pero que un día se fue,

que se comió la tarta entera y qué

también dejó la cama sin hacer".

El mundo se acaba

Hay algo que no expliqué en su momento y a día de hoy me toca explicarlo: ¿Por qué "Mi mundo en un cuadrado" dejó de existir?

Los motivos son varios, pero los explicaré lo más claramente que pueda.

- Mi situación personal no era precisamente cómoda (rompí con amistades de hace muchísimo tiempo y la  chica por la que siempre sentí devoción me dijo que era un ser despreciable) y hubo cosas de las cuales me deshice (entre ellas de mi viejo número de móvil) para desconectar de todo lo que me rodeaba.

- Cuando quise retomarlo con el archivo XML que lo dejaría todo como estaba antes no fue posible. Se ve que tenía muchas visitas y una página de soluciones informáticas tomó el dominio en cuestión.

- Leer y recordar a "la chica del pelo rojo" continuamente hacía mucho daño. Esa chica me atrajo mucho.

- Actualmente no tengo el archivo XML y no puedo reabrir ese mundo en un cuadrado.

Y ahora toca ser algo que siempre pensé que era: Un bufón sin gracia.

"Ven conmigo a pasear
ya sabes que el mundo se acaba
es un error monumental.

Nunca fui como pensáis
y si lo sé no digo nada...
a estas alturas me da igual."

El bufón

No ha llovido nada desde que cerré "Mi mundo en un cuadrado"...  era más joven, más impulsivo y, sobre todo, un completo negado a las relaciones sociales.

A día de hoy he superado alguno de mis miedos e intentaré retomar mi idea de diario-blog con el único lucro de no estallar por dentro, ya sea emocional o sentimentalmente.

Los que ya me conocéis, me alegro de teneros de vuelta y a los que no, bienvenidos a mi pequeño mundo.

"Aquí estoy otra vez, vestido de bufón..."